14 feb 2016

DESEOS PARA EL AÑO 2016

La espiritualidad no es fingir no sentir las emociones de rabia, impaciencia, tristeza, frustración, represión, impotencia o cualquier tipo de miedo. Nooooo, no es fingirlas,  es darnos el permiso de sentirlas y abrazarlas, mirarlas de frente para hablar con ellas y preguntarles para qué las siento, qué están enseñadome que no he comprendido, para que están acá. Las emociones hacen parte de nuestra condición humana, de nuestra espiritualidad, porque la espiritualidad no es meditar las 24 horas ni negarse a sentir. La espiritualidad es reconocer que tenemos un espíritu con experiencia humana y las emociones hacen parte de esa experiencia.

Al identificar las emociones y reconocerlas que son para sanar algo que no se ha integrado, un evento de la infancia sin superar, una experiencia del pasado sin procesar o quizás aún no hemos podido perdonarnos; significa que ya estamos empezando a crear consciencia de lo que verdaderamente somos. 

Cuando una emoción se repite a diario debemos saber que estará siempre ahí rumiando y rumiando si no se escucha. Al no escucharla se trasladará al cuerpo físico y se somatizará en enfermedad física. Si la escuchamos nos damos la oportunidad de  transformarla para disfrutar más de nosotros mismos y de cada experiencia. Las emociones son nuestro primer síntoma de que algo no está funcionando bien internamente. 

Al asumir la fuerza interior, ninguna fuerza externa permea la esencia que hay dentro, porque estamos en armonía con todo lo que existe sin juzgarlo ni querer cambiarlo como quisiéramos que fuera. Cuando aprendemos a transformar cada emoción generada por una experiencia, aprenderemos a vivir en alegría, paciencia, armonía, tranquilidad, tolerancia, agradecimiento, coherencia y fluidez con lo que existe.

Todo en la vida es un entrenamiento, es un estudio. Estudiamos un colegio, una universidad, un procedimiento laboral pero se nos ha olvidado estudiarnos a nosotros mismos. Este es el estudio que dura toda la vida, es simplemente crear conciencia de que cada día voy a ser mejor para ser competitivo con nosotros mismos. Es decirnos a nosotros mismos: El año pasado era tan impaciente con los trancones y este año aprendí a estar tranquilo mientras estoy ahí,  mientras tanto hablo por teléfono, escucho música o simplemente estoy e silencio escuchando mi voz interior.

Que cada año que pase no sea solamente para desear tener un ascenso a nivel laboral, cosas materiales, o conseguir pareja, sino también para desear una transformación interior, ser mejor que ayer y determinar  qué voy hacer diariamente para conseguirlo.

Que este nuevo año que comienza, sea más consiente del SER que eres y pide la transformación que quieres en ti para conectarte cada día con tu esencia.


Feliz año 2016 les desea Biohana, tienda.

Teléfonos: 3113341385-3027920

No hay comentarios:

Publicar un comentario